jueves, 10 de enero de 2008

CINCUENTA AÑOS DE LA MUERTE DE GABRIELA MISTRAL



Hace cincuenta años en el Hospital General de Hempstead, Nueva York muere de cáncer la primera Mujer Premio Nóbel de Literatura de Sudamérica: Gabriela Mistral, seudónimo que reflejaba su admiración por los poetas Gabriele D’ Annunzio y Frédéric Mistral.
Lucila Godoy Alcayata había nacido en Vicuña , en el norte de Chile y desde muy joven sintió deseos de enseñar hasta que finalmente se titula de Profesora Normalista.
Los primeros versos que escribe son publicados en diarios de la Región hasta que sus “Sonetos de la Muerte” –inspirados en la muerte de su amado- obtienen el primer galardón en los Juegos Florales organizados por la Federación de Estudiantes en Santiago en 1914. Ella los escucha en la galería del teatro Municipal anónima entre la multitud ya que no tiene los medios para presentarse dignamente en público.
Con escaso reconocimiento en Chile en sus primeros años emprende una serie de viajes que la llevan a conocer varios países de América, Estados Unidos y Europa, encontrando especial acogida en México.
Desempeña también importantes labores diplomáticas y participa en la Asamblea de las Naciones Unidas representando a Chile.
El 10 de Diciembre de 1945 recibe el Premio Nóbel de Literatura de manos del Rey Gustavo V de Suecia. Con este galardón se convierte en el primer literato latinoamericano en ser premiado con el Nobel. En 1947 recibe el Doctorado Honoris Causa del Mills College of Oakland, California y en 1951 –inexplicablemente seis años después del Nóbel- obtiene el Premio Nacional de Literatura en Chile. Entre los muchos doctorados "honoris causa" que ella recibió, fueron de la Universidad de Guatemala, de la Universidad de California, en Los Angeles, de Universidad de Florencia, en Italia, y varios otros, antes de que la Universidad de Chile finalmente decidió ofrecerla tal honor, en 1954.
“La obra poética de Gabriela Mistral surge del modernismo, más concretamente de Amado Nervo, aunque también se aprecia la influencia de Frédéric Mistral (de quién tomó el seudónimo) y el recuerdo del estilo de la Biblia. De algunos momentos de Rubén Darío tomó, sin duda, la principal de sus características: la ausencia de retórica y el gusto por el lenguaje coloquial. A pesar de sus imágenes violentas y su gusto por los símbolos, fue, sin embargo, absolutamente refractaria a la "poesía pura", y, ya en 1945, rechazó un prólogo de P. Valéry a la versión francesa de sus versos. Sus temas predilectos fueron: la maternidad, el amor, la comunión con la naturaleza americana, la muerte como destino, y, por encima de todos, un extraño panteísmo religioso, que, no obstante, persiste en la utilización de las referencias concretas al cristianismo. Al citado Desolación siguieron los libros Lecturas para mujeres destinadas a la enseñanza del lenguaje (1924); Ternura (1924), canciones para niños; Tala (1938); Poemas de las madres (1950), y Lagar (1954). Póstumamente se recogieron su Epistolario (1957) y sus Recados contando a Chile (1957), originales prosas periodísticas, dispersas en publicaciones desde 1925” (1)

Tras su muerte en Chile se decreta duelo oficial durante tres días y sus funerales son uno de los más apoteósicos que se recuerde.

________________________________________________

(1) Los Poetas



No hay comentarios: